Antes que nada
Casi
todo el mundo sabe que no es agua limpia lo ocurrido en la gestión legal de la constitución
de la Junta de Gobierno del CCCP. Actualmente se hizo un apaño con el pretexto
de darnos un “cambiazo”. Al tiempo, para seguir casi igual.
Lo
mismo ocurre con las perdidas o ganancias de los Congresos Nacionales. Son
situaciones raras. El congreso de Valladolid tuvo perdidas, el de Valencia con
menos asistentes tuvo superávit y Gijón tuvo ingresos positivos con menos asistencias.
Alguien mete la mano.
Es,
como me decía el otro día un compañero, reflejo fiel de lo que ocurre en España
a todos los niveles del Estado, políticos, jueces, médicos o bomberos.
A
nivel profesional como siempre las comparaciones son odiosas, pero en
determinados casos es importante hacerlo con sentido estadísticos para sacar
conclusiones. Han aumentado el número de podólogos y estos cada vez bajan más
los honorarios. ¿En qué notamos su efecto? en las Quiropodias. Han aumentado el
intrusismo estatal, al menos por aquí. El sistema público de salud ofrece
servicios asistenciales que por lo general acudían al podólogo. Me estoy refiriendo
a las intervenciones por parte de enfermeros de patologías como las
onicocriptosis, los papilomas, o el pie diabético. Otras de nuestras parcelas
que están intervenidas, por lo menos en mi comunidad, son las ortosis y los
soportes plantares. Que son enviados directamente a las tiendas de ortopedias. Con
respecto a las cirugías del pie, ni te cuento. Los podólogos que nos iniciamos
en la cirugía podológica, hemos despertado una necesidad, en lo publico, de una
patología que antes no había tanta demanda. Actualmente en casi todos los
hospitales públicos y en todas las comunidades se operan los hallux valgus, los
dedos en martillos e incluso el paquete completo de las posibles metatarsalgias
con las osteotomías elevadoras de Weil y esos pequeños tornillitos.
Recibo
algunas consultas de pacientes de otras regiones. Algunas muy confundidas por
si hacerlo por Mis o por cirugía tradicional. Me respuesta es siempre la misma:
“no es cuestión del tamaño de la incisión”, si sabe hacerla y de su indicación.
Es falso que la cirugía podológica por mínima incisión, la haga una maquina; o
que, el vendaje con tiras adhesivas, comprometan la circulación. Que el traumatólogo
de Murcia que hace Mis, tal... y tal, que si es traumatólogo, pero que ha
dejado de hacer mínima incisión, o que el podólogo que hace mínima incisión me haría
lo mínimo, todo eso, no justifica para que a un paciente se le cree unas dudas
inmensas que sepa donde acudir. En el fondo le están diciendo que “yo no”, pero
el otro tampoco.
Por
lo tanto, con el aumento de podólogos por números de habitantes y la dispersión
de nuestra cartera asistencial por otros profesionales del sistema público,
hace que cada vez sea más difícil vivir profesionalmente como podólogo. Han
dado ejemplos muchísimo compañeros que han decido estudiar otra carrera
sanitaria o bien, otros han decidido volver al sistema publico como medico o
enfermero.
Hay varias ofertas de aparatos láser para el
tratamiento de las onicomicosis. Cada vez salen nuevas soluciones y como
siempre, o casi siempre, los primeros son adelantados, aunque no por ello, se
lleven lo más avanzado.